Mala accesibilidad en las estaciones de tren en Torremolinos y Arroyo de la Miel

A pesar de que la sustitución de los veteranos trenes UT 446 por los modernos Civia llevada a cabo por Renfe durante 2009 permitió a la línea del Cercanías Málaga-Fuengirola dar un salto de calidad en cuanto a capacidad, velocidad, confort y sobre todo, accesibilidad, las estaciones de Torremolinos y Arroyo de la Miel se convierten cada día en un calvario para personas con discapacidad y personas mayores, pero también para quienes llevan un carrito de bebé e incluso para los turistas cargados de maletas que utilizan el enlace con el aeropuerto o el AVE.

La primera, porque necesita como agua de mayo una reforma integral después de 35 años de servicio; la segunda, porque a pesar de que cuenta con todas las facilidades desde su remodelación hace una década, las dos escaleras mecánicas que comunican con los andenes llevan prácticamente un año averiadas. «Menos mal que tiene ascensor, aunque es bastante pequeño; cuando entro con la silla de ruedas no cabe nadie más»,

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