Las estaciones de La Almudena, Alsacia, Avenida de Guadalajara y Las Rosas, en la línea 2, y Mirasierra, en la 9, constituyen, a juicio del Cermi, "un ejemplo de accesibilidad universal y buenas prácticas que sitúa a Metro de Madrid a la vanguardia de este tipo de iniciativas en toda España".
De entre las medidas contempladas que vienen a completar las ya existentes en un buen número de estaciones cabe resaltar, dice el Cermi, la instalación de pavimentos tacto-visuales que muestran a las personas con dificultades de visión o de comprensión los recorridos a escaleras, tornos, ascensores y billeteras.
Igualmente, son importantes los interfonos que permitirán comunicar con el personal de estación y que resultarán fácilmente utilizables por usuarios de baja estatura o por personas en silla de ruedas, los nuevos mensajes sonoros con información más completa en ascensores y la colocación de botoneras fácilmente comprensibles que cuentan con sistema braille en el exterior e interior de la cabina.
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