La Concejalía de Urbanismo, a través del Área de Rehabilitación Urbana (ARI), ha iniciado un proyecto para hacer más accesible el casco antiguo de León. Sin una dotación concreta, pero con el objetivo de que las seis rutas que se plantean estén concluidas a final del actual mandato, el departamento que dirige Belén Martín Granizo quiere acabar con las últimas barreras tanto arquitectónicas como urbanas que existen «para que todo el mundo esté en igualdad de condiciones» para visitar los monumentos. Todas las rutas que se plantean desde el Ayuntamiento, que incluyen trayectos hasta los principales monumentos y entradas al casco antiguo desde diferentes zonas de la ciudad, cuentan con barreras urbanas y arquitectónicas.
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